La gran mayoría de los dueños de vehículos con motor a gasolina realiza solo dos tareas de mantenimiento en él: le cambia el aceite (tratado en un tip anterior), y lo recarga de combustible. Y aunque suenen como tareas sencillas, son comúnmente mal efectuadas ya sea por desinterés o desconocimiento.
Las opciones
Si de gasolinas se trata, en el país existen tres tipos de ellas, aunque en estricto rigor es solo una, estas son la de 93, 95 y 97 octanos. Digo que en estricto rigor es una, porque solo varían en este ítem, los octanos, en el resto de cualidades, propiedades y aditivos son los mismos en las 3 versiones. ¿Qué tiene tan importante entonces este aspecto que nos lleva a usar uno y no otro?
Antes de eso debemos aclarar otros puntos, como lo son la relación de compresión (RC) y la detonación. La primera dice relación a cuántas veces se comprime la mezcla de gases en un cilindro, que es en promedio 10 veces, o lo que es lo mismo, una RC de 10:1. Lo segundo tiene estricta relación con lo primero, y es la tendencia de la mezcla a explotar espontáneamente antes de que lo haga con la chispa de la bujía, producto del extremo calor que se genera por las altas compresiones generadas en el cilindro.
Estableciendo y entendiendo esto, podemos entender por qué los diferentes octanos. Solo hay que saber que, entre más octanos tiene la gasolina, más costará que haga explosión. ¿Y por qué se quiere que no explote tan fácil?
La relación de compresión va aumentando junto a la potencia del motor, y por termodinámica de gases, también su temperatura. Al aumento de temperatura se suma un aumento del riesgo de que la mezcla se encienda espontáneamente, evento que se conoce como cascabeleo. Esto no es otra cosa que el pistón moviéndose horizontalmente de un lado a otro mientras termina su ascensión, pudiendo llegar a fracturarse. Por esto el octanaje busca detener esta tendencia y permitir que la gasolina encienda solo con la chispa de la bujía. Dicho en un lenguaje sencillo, mientras más relación de compresión tenga un motor, más octanos se deben usar en la gasolina, para evitar el autoencendido. NO ES UN POTENCIADOR O AUMENTADOR DE RENDIMIENTO, el motor no funcionará mejor ni dará más km/lt por usar un octanaje más alto, en estricto rigor solo estará botando su dinero en algo que no provocará ningún desperfecto, pero tampoco generará ningún beneficio.
En general la relación de Octanaje/RC es de 93 octanos para relaciones de entre 9,5:1 a 10:1, de 95 para 10,5:1 a 11:1 y de 97 para 11,5:1 y más.
Como conclusión, los octanos que debe contener la gasolina que le ponemos a nuestro automóvil deben ser los establecidos por el FABRICANTE en el manual de propietario, siendo la marca de la gasolina solo un mero tema de confianza personal o preferencia.
